En Descargamaría nos situamos en la iglesia parroquial de San Julián el Hospitalario (siglo XVI), avanzamos por la carretera CC-5.1. Este vial se abandona a la derecha por una pista donde se encuentra la Piedra “Hincá” y se dirige a la Ermita del Humilladero, también del XVI.
La travesía cruza varios cauces afluentes del Árrago, como el arroyo del Puerto y el río Nobleas. Este último se supera por un puente situado junto al campamento juvenil San Francisco de Asís, con vistas a la Torre de la Almenara, al fondo, que la visualizaremos durante muchos kilómetros de la etapa. Al llegar a la CC-5.1, se sigue por ella unos metros a la derecha para abandonarla por un camino a la izquierda que cruza el río Árrago por otro puente.
Las edificaciones derruidas de Horcajo de Alcornocal acompañan a nuestro itinerario, que se adentra en un bello camino con mucha vegetación. Así llegamos de nuevo al curso del Árrago, que se cruza por una pasarela que a veces es arrastrada con las crecidas del río. De nuevo se llega a la carretera, que abandonamos hacia la izquierda por un carril irregular flanqueado de muros de piedra que nos lleva a cruzar un vado por una pasarela. Tras atravesar el barrio de las Heras, la ruta entra en la población de Cadalso
Una vez en Cadalso, el senderista tiene la posibilidad de recorrer el sendero SL-CC 205 “La Sierrilla”, que le llevará a recorrer los densos bosques de la Sierra de las Jañonas. Este sendero tiene su inicio junto a la parada de autobús.
Información de las poblaciones por las que pasa el sendero:
Sus habitantes disfrutan de uno de los entornos más vírgenes de toda Sierra de Gata, repleto de riachuelos que van a parar al río Árrago, auténtica arteria de la villa. Otro río, el Malena, también atraviesa el término municipal con abundancia de truchas. Estas limpias aguas son las únicas de todo el norte de Extremadura que no alimentan al río Tajo, sino que lo hacen a la cuenca del Duero a través del hermoso Valle de La Malena. El Árrago ha sido el principal diseñador de la estructura de esta población, donde su núcleo rural guarda callejuelas estrechas y bellos pasadizos que forman su trazado medieval, confiriéndole un aire especial entre el río y el inicio de la áspera serranía (Sierras de la Bolla y Gomara).
Destaca la Iglesia de San Julián el Hospitalario (s. XVI), la pequeña Ermita del Cristo del Humilladero (s. XVI) y la Ermita del Manso Cordero (s. XVI). El viajero no debe dejar de visitar la Reserva Biológica del Buitre Negro y el punto de observación ornitológico “Muladar del Buitre Negro”.
Pequeña localidad bañada por el río Árrago y custodiada por la Torre de la Almenara. Para el disfrute del viajero, goza de un enclave excepcional, "Los Cachones" junto al río, y la Pesquera, que bien pudiera considerarse un parque natural. La historia de la población se remonta a las visitas del rey Alfonso IX durante las cacerías por la comarca. En su casco, destacan los soportales de la Plaza Mayor, la antigua cárcel de la villa, fechada con el epígrafe de Real Cárcel año 1793, la Iglesia de la Concepción (siglos XV y XVI) y la Ermita del Cristo del Humilladero.